En materia de ciberseguridad en los centros sanitarios, sus defensas son tan sólidas como sus empleados. En el panorama digital actual, las amenazas cibernéticas evolucionan constantemente y se necesita un esfuerzo colectivo para garantizar la seguridad de los datos de los pacientes y protegerse contra posibles infracciones.

Consideremos un ejemplo. Imagine que ha implementado medidas de seguridad sólidas para salvaguardar la información de los pacientes, como cortafuegos, cifrado y sistemas de detección de intrusiones. Sin embargo, si sus empleados no están capacitados en los protocolos de seguridad adecuados, pueden ser víctimas sin saberlo de estafas de phishing o compartir inadvertidamente información confidencial a través de canales no seguros. Este paso en falso podría exponer a su centro sanitario a importantes riesgos de ciberseguridad.